Según informa News.com, Microsoft estima que su próximo sistema operativo correrá a tope en un PC a 3 GHz con 512 MB de RAM. Sin embargo, escalarán el rendimiento de Windows Longhorn para que también funcione en PCs más viejos con hasta 128 MB de RAM. Aunque eso sí, entonces la funcionalidad y apariencia estarán más que recortadas, pareciéndose bastante a lo que nos ofrece hoy día Windows XP.