Decir que el mercado chino es una oportunidad enorme para que la cuota de mercado de iOS siga creciendo a buen ritmo es decir poco, y en Apple lo saben bien. Ayer se lanzaba el iPhone 4S en el país asiático, y las colas para conseguirlo en las principales Apple Store fueron tan enormes (simplemente mirad la cola en la imagen superior, es la de Pekín) que no iba a haber unidades para todo el mundo. Los incidentes fueron inevitables.
Muchos revendedores ocupaban las colas de las icónicas tiendas de Shangai, Hong Hong y Pekín, lo que causó el descontento de los clientes que esperaban. La policía tuvo que intervenir para que la cola circulase correctamente, e incluso en las tiendas de Shangai y Pekín tuvieron que cerrar para garantizar la seguridad tanto de los clientes como de los empleados. De momento, Apple ha decidido no vender ninguno hasta que llegue un nuevo stock de terminales a las tiendas. Así, para conseguir un iPhone en esas ciudades lo mejor de momento es encargarlo en la web de la Apple Store o ir a algún distribuidor autorizado.
El éxito está asegurado en China después de lo que hemos podido ver (tanto que Apple va a abrir 25 nuevas tiendas!), pero si la afluencia de personas y revendedores sigue siendo tan alta en Apple tendrán que tomar medidas extra para poder evitar más malos ratos. Con algo de suerte comentarán alguna cifra de ventas en China mediante alguna rueda de prensa o en el evento para accionistas del próximo 24 de enero.
Fuente: xatakamovil