Sentencia final: Samsung tendrá que pagar 1.049 millones de dólares a Apple. Tras las dos erratas detectadas en la resolución del jurado, los miembros se han retirado para solucionarlas y corregirlas en rojo.
Tras más de media hora encerrados en la sala de deliberación, han vuelto a entrar en el juicio para leer los errores corregidos.
Finalmente, Samsung tendrá que pagar 1.040 millones de dólares a Apple por daños causados en sus ventas dentro de Estados Unidos.
Poca diferencia con la cifra inicial: 1.050 millones de dólares.
De momento no se ha hablado de bloqueo de ventas de los dispositivos de Samsung en Estados Unidos.
Apple urge a Lucy Koh, la jueza que lleva el caso, a que programe una vista lo antes posible para tratar el tema.
Por su lado, los abogados de Samsung han reiterado que necesitarían contar con más tiempo para repasar todos los datos del juicio, cifras y la resolución del jurado popular.
Finalmente, la próxima vista está fijada para el 20 de septiembre.